Capitulo 70

Mis palabras son fáciles de comprender

y fáciles de practicar.

Pero nadie en el mundo las comprende,

nadie las practica.

Mis palabras tienen su fundamento

y los actos tienen su dueño.

Pero nadie los conoce y nadie me conoce a mí.

Raros son los que siguen

y éste es el máximo valor.

El sabio oculta bajo pobres vestidos

piedras preciosas en su pecho.